El 24 de Agosto de 1966, la banda The Doors empezó a grabar su disco debut homónimo. La grabación estuvo a cargo del productor Paul A. Rothchild y el ingeniero de sonido Bruce Botnick, en los estudios Sunset Sound en Hollywood (California, EEUU).
La grabación se hizo en menos de 4 semanas usando una grabadora a cinta de 4 pistas; básicamente en una pista grabaron el bajo y la batería, en la segunda pista la guitarra y el órgano, y la voz de Jim Morrison en la tercera pista. La cuarta pista la reservaban para hacer los overdubs. El sesionista Larry Knechtel tocó un bajo eléctrico en varias canciones para reforzar el sonido de bajo que hacía Ray Manzarek en su teclado.
Este primer álbun de la banda incluyó varios de los que serían luego clásicos: Break on through (To the other side), Light my fire y The End.
